lunes, 23 de diciembre de 2019

Para que la cicatriz respire











  







PARA QUE LA CICATRIZ RESPIRE


Abro mis vértebras para contarme:
no me alcanzan las piedras, los botones de cuarzo reluciente,
no me alcanzan las gotas sobre la herida húmeda.
Podría descolgar mi esqueleto y construir un puente de pudieras,
la arquitectura de una ciudad rendida justo antes del incendio.
No me llegan los cabellos de las mujeres tristes, el ábaco de contar abandonos, el mismo error repetido hasta el vómito.

                        Una alfombra
                        de fango
                        para ocultar las huellas.
                        Pestañas para que su abanico
                        disperse las mañanas en jirones.

Abrir el cuerpo como ventana de un cuarto sin ventanas, mi horizontado cuerpo contra el vidrio empañado de la infancia.
El dibujo de un niño que se hizo dedo sobre el vaho dormido.

(De libro inédito)

No hay comentarios:

Publicar un comentario